martes, 29 de septiembre de 2009

QUISIERA SER TAN ALTA COMO LA LUNA (Y TAN SIMPLE COMO UN BESUGO)

La lluvia torrencial
es a veces
signo de fortuna.

En otras ocasiones
el sol radiante
augura un mal día.

Si me quieres porque me quieres
y si no
porque me olvidas

No hay comentarios:

Publicar un comentario