QUÉ CLASE DE MUJER NO LLEVA KLEENEX

Un bolso lleno de elementos tremendamente prácticos
te hará sentirte una mujer
hecha y derecha.
Cuando tú en realidad lo que quieres
 es otra cosa.

¿DÓNDE ESTÁ?

Dejar de ver el final
y
el principio
y borrar
sin pensar
que
es experta
en dibujar la cuerda, con solo ver los cabos.

La que hace un tiempo habría soplado
hasta volar su tejado
ahora,
sólo se da la vuelta
desubicada al descubrir
que con una racha de viento
han volado los papeles
del nido que no construyó.

MATERIALES AISLANTES Y CONDUCTORES

Estómago en la boca al abrir la ventana
que da al viento de poniente.
(El que barre, y deja lacio todo lo que toca).
A través de ella,
electricidad estática en el cabello
 y una línea recta al final del paisaje,
que cualquiera podría confundir con un cable de alta tensión,
o un reglón fantasma infinito.

EL DESEO DE LO CÍCLICO

Se pregunta si,
después de cada invierno,
la primavera siempre te exprime el estómago,
sólo porque durante tres meses
has tenido la sangre congelada.

Y si lo deseas.

LA LLAMADA

Hay una cabina de teléfonos borrosa
en la que están ellos
hablando por el auricular
golpeando el cristal,
mientras les hago una foto
desde fuera.

El tiempo no pasa
dentro de esa caja,
al otro lado del hilo
del oráculo.

TE LO TENGO DICHO

Es cierto,
no fue una buena idea
escalar el barranco
apoyando los pies
en filos de navajas

ECO

Tus ojos son las piedras
que lanzo al fondo del pozo
para que devuelvan
mi voz
con la tuya
cuando me asomo

UN NIDO

En mitad de la noche
tu mano
es un gorrión
diminuto y dormido
descansando
en el nido
de mis dedos